Si es el momento para pintar las paredes de tu casa, hay diferentes consejos que debes conocer o saber para que sea un completo éxito.
Las herramientas que debes utilizar para pintar
pinceles de varios tamaños
cinta de carrocero
plasticos cubre muebles
rodillo y cubeta
palo alargador extensible
Antes de empezar a pintar
una habitación debes prepararla y tener todo a mano. Por ejemplo, quita todos los muebles que puedas, y si hay alguno grande como un armario o sofá, tápalos con una sábana que no te sirva o plásticos. Además de los muebles, quita lo que esté colgado o atornillado en la pared, como pueden ser cuadros, estanterías, repisas… también quita las tapas de la luz, pero antes de hacerlo quita la luz.Después debes comprobar que las paredes están en buen estado. Quita la pintura que se levante fácilmente con una espátula, lija la superficie y después ya podrás pintar. Si hay grietas o agujeros, tapa con masilla, deja secar y lija antes de pintar.
Antes de comenzar, protege con cinta de carrocero las tomas y otros objetos que estén en la pared, como las antenas, marcos de ventanas o enchufes. Tapa el suelo con alguna manta vieja o plásticos.
Asegúrate de que la habitación esté muy bien ventilada y que esté bien iluminada para que así te sea más fácil ver cómo te está quedando.
Que pintura y color escoger
Cuando compres la pintura, no te fíes de los tonos que hay en las cartas de muestra:
el trozo es tan pequeños y hay tantos similares que pueden despistarte fácilmente. Lo mejor es que lleves un objeto con el color exacto que buscas. Por ejemplo un trozo de tela o un cojín.
Si eres muy exigente, una vez en casa, pinta 1 metro cuadrado de pared y espera al día siguiente. Ve observando el tono a medida que cambian las condiciones lumínicas: con luz natural, de noche… Las variaciones podrían no gustarte. Además podrás comprobar cómo combinan con él las telas, o el color de los muebles.